Las hembras de delfín tienen un clítoris diseñado para el placer
CIENCIA Y TECNOLOGÍA. — Las hembras de delfín tienen un clítoris funcional, esponjoso y eréctil, que explica que estos cetáceos no limiten los encuentros sexuales a la reproducción, según una investigación de biólogos estadounidenses que presentan hoy los resultados en la revista Current Biology.
Los nuevos datos refuerzan la teoría de que la sexualidad ha adquirido una función adicional a la reproducción en algunas especies de mamíferos sociales, entre las que se encuentra la especie humana. Concretamente, la sexualidad contribuye a reforzar los vínculos entre miembros de un mismo grupo, lo que ha favorecido la evolución de adaptaciones anatómicas asociadas al placer.
Un clítoris muy similar al de humanos, en una anatomía muy distinta
El hallazgo del clítoris funcional de delfín hembra es la conclusión del análisis de varios clítoris diseccionados de hembras de delfín, ya sin vida, y de la comparativa de sus tejidos, células y anatomía. En realidad, los científicos estaban estudiando y diseccionando vaginas, pero se toparon con que en cada nueva disección se apreciaba un clítoris grande y desarrollado.
«Teníamos curiosidad por saber si alguien lo había examinado en detalle para ver si funcionaba como un clítoris humano», declara en un comunicado Patricia Brennan, del Mount Holyoke College de Massachusetts, que ha realizado la investigación junto a científicos de la Universidad de Florida y de la Universidad de Texas A&M.
La investigación se ha basado en el estudio de once ejemplares de la especie Tursiops truncatus, o delfín mular, que es la más conocida de las más de treinta especies de delfines que existen.
Brennan y su equipo sabían que los delfines tienen relaciones sexuales no sólo para reproducirse, sino también para reforzar vínculos sociales, y sospecharon que el clítoris podría ser funcional. Descubrieron capas de tejido esponjoso y eréctil, con zonas de una extensa y gruesa inervación bajo una capa epidérmica muy fina y sensible, que se configuraba con más complejidad en las hembras más maduras sexualmente.
Biología evolutiva del clítoris
Brennan anotó que la estructura del clítoris funcional o dotado para el placer se había descrito en humanos y bonobos. Su trabajo explica algunas conductas de las hembras delfín, que buscan frotar la zona con el clítoris de otras hembras, conducta homosexual reportada entre delfines mulares.
«La estimulación directa del clítoris parece ser importante durante las interacciones sexuales entre hembras, que se frotan mutuamente el clítoris con el hocico, las aletas o la cola», explica Brennan. Otras conductas sexuales son la masturbación o el buscar frotar la zona, y una mayor predisposición a encuentros sexuales con delfines machos recreativos más que reproductivos.
Anatomía del clítoris de Delfín hembra
El clítoris en algunas especies de hembras se forma a partir de las mismas células que durante el desarrollo embrionario dan lugar al pene en los machos. La similitud entre hembras humanas y de otras especies de mamíferos podría explicar una de las tretas de la naturaleza para favorecer los encuentros reproductivos pero también para mantener la cohesión de los grupos en especies sociales.
Por otro lado, esta particularidad de origen embrionario común entre pene y clítoris ha llevado a considerar que el clítoris podría ser un pene atrofiado, o madurado a medias, por la influencia de factores hormonales no solo en mamíferos, también en otras especies de reptiles y aves.
El estudio de la sexualidad femenina
La investigación científica sobre la sexualidad recreativa ligada al clítoris es escasa, algo en lo que los investigadores repararon al iniciar su investigación. Brennan explica las escasas referencias a la sexualidad femenina en biología en general y del clítoris humano en particular, que no se describió completamente hasta la década de 1990.
«Este descuido en el estudio de la sexualidad femenina nos ha dejado con una imagen incompleta de la verdadera naturaleza de los comportamientos sexuales», dice Brennan. «Estudiar y comprender los comportamientos sexuales en la naturaleza es una parte fundamental de la comprensión de la experiencia animal y puede incluso tener importantes aplicaciones médicas en el futuro».
(Publicada el 10/01/2022 / Isabel Troytiño)
