MÁS IMÁGENES, 29. Y febrero otro poco
A tres homicidios por día, el pasado año mexicano del 2018 fue el más violento del que se tenga noticia. Es inútil endosárselo al re-enamorado Peña Nieto; lo que puede hacerse es acreditárselo a su viejo desinterés por hallar soluciones verdaderas. Hablamos de su cerebro y conciencia no del copete piloso.
Esto a sabiendas que entre más tardemos en hallarlas, más tarde acabaremos. Si terminamos. Lo peor es que algunos suponemos que las respuestas están fuera del país, es decir, dentro de las redes delicuenciales en la comunidad internacional. Pero esto significaría una intromisión en las cosas de México.
Lo que es decir una intromisión en la persona del señor presidente. Pero el crimen organizado es quien tejió internacionales cadenas de producción y distribución, un organismo que es más rico que los estados y que usa mejor tecnología. Ningún valioso hallazgo extranjero será bien recibido, si así lo estamos entendiendo.
Más confusiones respecto a la Interpol y sobre algunos acuerdos internacionales de soporte y apoyo. Eso no quita que en cierto arranque emotivo, AMLO recomiende a Trump que acabe con los cuatrienios, cambiando a sexenios, que acá son muy buenos. Es decir, hay insularidad para ciertas cosas pero no para otras. Gajes de un gobierno casero. Por cierto, el pasado enero rinde un número mayor de homicidios que el pico del año pasado.
POR LO PRONTO ES de hacer notar, curiosamente, que el mejor negocio después del de los narcos, es el del oficio de los enterradores del país que hicieron más de tres agostos en sus contabilidades por las abundantes fosas escondidas y encontradas que carcomen a México como un enorme queso de ojillos. Ante esto, durante la primera reunión – obradorista– extraordinaria del consejo de seguridad pública, la presidencia tuvo a bien ofrecer un decálogo de deseos y unos 11 mil MDP para estimular la coordinación entre las diversas fuerzas comprometidas a meter orden, por más que la política que se entiende en palacio es la del diálogo y más diálogo, empleos emergentes distribuidos entre nacionales y emigrados, dado que el olvido y el perdón (O&P) se manejan como receta de salida. (Todo esto suena más a eclesial que a los derechos humanos como los demás terrícolas entendemos). ¿Habría O&P para un distante El Chapo?
“La corrupción incluye la deshonestidad de los gobernantes”, aseveró López Obrador. Mientras la gente buena predomine y denuncie –nos dicen—, se homologará acciones que serán evaluadas, se actualizará y reunirá la información sobre vehículos robados, se revisará el sistema penitenciario (que pudiera adelgazar el número de sus reclusos no peligrosos, etc.). Se insistirá (?) en la capacitación policiaca y se adecuará su equipamiento. Se intentará sensibilizar a los perseguidores de la ley. Aunque persistirían las agonías económicas y operativas del ministerio público, sin desterrar sus corruptelas, y su ignorancia legal o su rebase tortuoso, la improvisación de cuadros. Ni la enfermedad de mal armar las carpetas de investigación de modo que los jueces sigan haciendo uso de la puerta giratoria. Todo esto bonito suena al siglo veinte cuando comenzó la idea de que las bajas son sólo de delincuentes, humanos como fueran. Falta un claro equilibrio y una separación entre justicia y derechos humanos que parece ningún mexicano es capaz de establecer. Otro imposible es la evaluación de procuradurías y fiscalías cuando el estado resulta que es juez y parte.
MALOS NÚMEROS son los que entrega cierto banco que se puso a comparar a tirios y troyanos. Para esa institución, en enero, la sociedad perdió ocho veces más que lo ahorrado en petrolíferos a raíz de esta nueva guerra que sufrimos. Por el desorden y la miopía ante los daños colaterales de estas batallas, dicen. De continuar las cosas sin cambio, al final del año, Pemex habría se recobrado a lo largo de doce meses, triunfo tras triunfo, pero las empresas y ciudadanos nunca. Los bloqueos, las escaramuzas militares, las muertes y los enfermados por el huachicoleo amateur y el profesional indican además que seguirá perdiendo bienes, operaciones y ganancias legales. Pero “No cejaremos”, se dice mañaneramente. ¿La instrumentación del reto no está a la escala y calidad del delito? A veces dudamos si la delincuencia organizada es atacada por un estado del mismo peso. Parece desorganizado, improvisatorio y hasta ocurrente, ante Ocho tantos acumulables. La liga se rompe por lo más delgado, dijo la abuela. Así que sin duda los resultados nos darán rasgos de la verdad verdadera. La duda persiste: ¿Acaso es Dios miembro de Morena?
DADO QUE EL AUDIO de algún noticiario era defectuoso, nunca supimos si, tras derrapar Porfirio Muñoz Ledo dijo “Estoy bien” o dijo “Estoy viejo”, o nos dijo “Estoy beodo”
NO SON POCOS LOS AGRAVIADOS sonorenses a partir del año 2014 que hoy han levantado las cejas por las noticias que vienen de CDMX. Así va la crónica: Bajo un look mitad Fidel, mitad san Diego Fernández de Cevallos, mitad Cat Stevens, mitad el maharashi de The Beatles, apareció un barbado Guillermo Padrés (PAN) en las redes sociales. Cierto Miguel que no conocemos le pidió al exgobernador sonorense dar algún mensaje por los recientes eventos, porque el segundo juez que conoce de su segundo delito le ha liberado, también, a prisión domiciliaria (¿no en su entidad donde quizá hasta le mordieran con rabia, más que lo que su canalla amiguera y parientes le aplaudiría?). Tras pagar una fianza por 40 millones de pesos ‘familiares’ así lo dijo: “No me la creo. Les mando un abrazote. Espero verlos pronto… Recuerden que todavía me queda un poco de ocotillo (un cacto espinoso regional). Nomás les mando saludos. Espero verlos pronto. La única palabra que se me viene a la mente es gracias”. Por su parte, su defensor, el abogado Lozano Gracia (PAN, ése que se sirvió hasta de videntes en el caso Florence Cassés) reiteraba que su defendido “Está preso por sus ideas y es un preso político”. Mientras la fiscalía de Sonora mantiene abierta otra carpeta en contra del empresario exgobernador, por corrupción. Que haya buenos quesos blanquiazules no hay duda pues hay mariachis para todas las orejas. ¿Sigue siendo blanquiazul este delincuente o es uno más que no hace mucho verano para un agónico partido?
FEBRERO PLACENTERO en Veracruz. Cuenta la columna colectiva de El Universal que, en el celebérrimo Café Los Portales de Córdova, se cotizaba entre los 200 y los mil pesos cada banco para desayunar dentro del mismo aire que respiraba el señor presidente –de gira por Oaxaca, terminando en Veracruz, el primer fin de semana del año–. Como sucede con el papa de Roma o Maradona, Juanga o Phelps, el imán produce. La creatividad de la IP demuestra que el poder de López Obrador es ciertamente limitado. Más si se considera que, demorado el vuelo comercial para su regreso a CDMX, Andrés Manuel y la comitiva tuvieron que dispersarse por carretera a fin de tocar tierra federal nahuatlaca…. directamente hacia el primer Fin-de-Semana-Largo del año, es decir una otra fecha comercial donde el (pasado) gobierno ayudó a descalendarizar y desmemorializar todavía más el respeto a las fechas históricas de los mexicanos.
DEJAD QUE 340 MIL NIÑOS se alejen de mí– Todo un tango vino a provocar la lengua suelta del secretario federal de hacienda. La historia lleva un trasfondo ajeno a lo que es administración pública, desde que el presidente se adhirió políticamente a la puntada. Así se creó una innecesaria pero dolorosa bola de nieve llamada: “Que los abuelos se encarguen”
Como es usual ya de madrugada en CDMX, una mañanera dio a conocer sin datos que las estancias infantiles Sedesol del país estaban contaminadas por la corrupción. Era necesario –dijo AMLO- terminar con ellas, de un tajo. Para eso, el personal de las estancias que fueron de Sedesol no recibirán más los apoyos por cada infante y por cada infante minusválido, sino que serían las familias las recipendarias del dinero al efecto de colaboración directa de la presidencia con sus clientelas. Así son algunas mañaneras. Sin datos de apoyo.
De inmediato trascendió que había abuelos de todos colores. Los hay difuntos, trasterrados y enfermos, también incapaces por salud y por gusto; y otros que están para ser ayudados no para ayudar; los abuelos más jóvenes se labran la vida, todavía, trabajando pese a la edad y los (ahora) 40 pesos diarios de la pensión estilo Morena. Hay abuelos que dicen que la bronca es de los padres-fabricantes- de -niños, que ellos ya cumplieron su parte. Los más drásticos emitieron la célebre pregunta “¿Y yo por qué?”
Lo único seguro es que ni el secretario Urzúa ni el presidente López dedican doce horas de todos sus días a cuidar a sendos nietos. Estuvieron hablando de más porque ninguno de ellos sabe de puericultura. Tampoco la inmensa mayoría de los abuelos mexicanos.
Políticos anticuados, la puericultura es un grupo de conocimientos que mejoran el acostumbrado desarrollo infantil, no sólo su resguardo como objetos que se mueven, mean, cagan y lloriquean. Los infantes no son animalitos por adiestrar. La vida se desarrolla y si se la desarrolla mejor y más pronto, tanto mejor. Ya hay una tecnología propia probada. Ahora se sabe que el hecho de salir de casa hacia una estancia ayuda a la sociabilidad del niño, al desarrollo inusitado de la imaginación creativa y de su inteligencia emocional, más allá del cuidado casero. ¿Ellos deberían saberlo? Quizá no, pero se pudo preguntar en vez de abrir la boca en el noticiario más largo del mundo. La guadaña del AICM se ha vuelto a aplicar: cortar de raíz sin miramientos como señal de poder, de originalidad, de la ruptura con la mafias del poder, dentro de la Magia del Poder, Sin información que justifique la noticia. Es la guillotina para el aplauso de los pobres en miseria (Francia, siglo XVI). Conclusión evidente: “Las estancias son fruto de la cultura neoliberal”
¿Pero cuánto costaría una investigación, oficial y sensata, acerca de las bondades de una modalidad avanzada, interdisciplinaria, del negocio que se llama estancia infantil. ¿No existen modelos alternativos, inmejorables, entre países avanzados incluidos los sudamericanos? Por favor, siquiera Informarse por la bibliografía en algún café Internet (diez pesos la hora). Y luego, sabiendo la realidad y en justicia, extirpar a los corruptos, los improvisados y los jineteros…(Como si en Siberia estuviéramos discurriendo que sería urgente:) Purgar el 1.8% de estancias ilegales, purificar el 7% con algunas irregularidades y permitir graciosamente que el 91.2%, que son las demás, dejarles seguir con su trabajo. Para dejar que los niños ¿se acerquen sin miedo al señor presidente? No, sino para ayudarles a crecer sin telarañas, desde chiquitos, como nunca, no como otros ya ancianos que crecieron bajo el reinado de la maestra Gordillo. Si la educación no es liberadora, no es educación. Al populismo le encanta repartir billetitos para desactivar conflictos, no para resolverlos. Esto se llama clientelismo. La verdad monda y lironda es que escoger o no atender una guardería es cuestión familiar, es decir, es cosa privada. Y urgente. Cerrarlas es atentar contra la libertad de los niños del pueblo bueno y sabio. ¿Debe el Estado pensar por nosotros o para nosotros? (Continuará)
–Dionisio Estrada
Publicada 07/03/2019