Medidas aplicadas hace un siglo se parecen a los pasos para frenar el coronavirus
ESTADOS UNIDOS. — Según los investigadores de la Reserva Federal que analizaron la pandemia de influenza de 1918 en los Estados Unidos, las medidas de contención del coronavirus que obligan a las economías a desacelerarse o detenerse en última instancia pueden ser mejores para el crecimiento económico que los esfuerzos más laxos.
La investigación se presentó en un documento publicado en forma preliminar el jueves, mientras la economía de Estados Unidos se detiene para detener la propagación agresiva del nuevo coronavirus. Los autores incluyen a Sergio Correia de la Junta de la Reserva Federal, Stephan Luck de la Fed de Nueva York y Emil Verner del Instituto de Tecnología de Massachusetts.
El presidente Donald Trump hizo un llamado para que la economía se recupere pronto, diciendo que le gustaría que «solo esté ansioso por irse en Semana Santa». Algunos economistas han advertido que si tal movimiento causara que el virus aumentara, en última instancia, tendría un costo mayor que la crisis actual.
El periódico dijo que la gripe, que mató entre 550,000 y 675,000 estadounidenses, o el 0.66% de la población, causó una «caída aguda y persistente de la actividad económica real». Un estado de EE. UU. En el nivel promedio de exposición sufrió una reducción del 18% en la producción manufacturera en 1918. Esos efectos persistieron durante años y las economías deprimidas, especialmente en las regiones con niveles más altos de infección.
Pero los pasos dados para detener la propagación del coronavirus como distanciamiento social, identificados por los investigadores como «intervenciones no farmacéuticas» o NPI, no tuvieron los mismos efectos negativos.
«Las ciudades que implementaron intervenciones de salud no farmacéuticas más rápidas y contundentes no experimentan peores recesiones», escribieron los investigadores. «En contraste, la evidencia sobre la actividad manufacturera y los activos bancarios sugiere que la economía funcionó mejor en áreas con NPI más agresivos después de la pandemia».
El documento trazó claras distinciones entre Covid-19, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus y la gripe. Esto último parece tener una tasa de mortalidad más alta, por un lado.
Pero existen posibles similitudes entre las dos pandemias, y los autores citan lugares como Taiwán y Singapur que implementaron medidas tempranas, han limitado el crecimiento de infecciones y han «mitigado la peor perturbación económica causada por la pandemia».
(PUBLICADO EL 27/03/2020)
