Piden nombrar el teatro de la Casa de la Cultura de Tijuana en honor del fallecido director Hebert Axel
TIJUANA, MÉXICO. MX. — Hebert Axel González, quien el pasado 19 de abril falleció a causa del COVID-19, fue uno de los más grandes impulsores de las artes escénicas en la ciudad y es considerado un puente entre la tradición teatral de Tijuana y las nuevas generaciones de actores.
Tenía 60 años y una larga trayectoria como actor, director y promotor de teatro, por lo que hay quienes consideran que Hebert Axel debería tener un escenario post mortem.
Para ello, un grupo de amigos, escritores, dramaturgos y promotores culturales de Tijuana solicitan que el teatro de la Casa de la Cultura de Tijuana lleve su nombre: Maestro Hebert Axel González. La petición ha sido hecha a través de change.org.
Desde el 1 de octubre de 2019 y hasta el día de su muerte, Hebert Axel se desempeñó como director de la Casa de la Cultura en la delegación San Antonio de los Buenos, pero su trabajo como promotor teatral se remonta a finales de la década de 1980.
Desde entonces estuvo muy ligado al desarrollo cultural en la región tanto como maestro de teatro, promotor y funcionario.
Junto con el actor Carlos Corro —su amigo y compañero de vida— el 11 de septiembre de 1993 fundó la Compañía de Teatro del Sótano al habilitar una pequeña bodega abandonada en el traspatio de la Casa de la Cultura para presentar ahí sus obras.
Es considerado uno de los pilares del desarrollo del teatro en Baja California y entre algunas de sus aportaciones destaca el hecho de haber establecido que en Tijuana se llevaran a cabo las primeras temporadas teatrales.
Las minorías a escena
Para el escritor Luis Humberto Crosthwaite —quien era su amigo desde que cursaban la escuela preparatoria— Hebert Axel procuraba representar a las minorías en sus puestas en escena.
«Él tuvo esta idea y nadie más la ha tenido. Él era de la idea de que siempre debería de haber teatro en Tijuana, que no nada más fuera un espectáculo, porque él decía que el teatro tenía que entretener y educar. Sus obras tenían un mensaje, como la expresión de la desigualdad social, cuestiones de género y hacía mucho trabajo que tuviera relación con minorías”, comentó Crosthwaite.
Hebert Axel también es reconocido por su larga trayectoria como maestro de teatro, entre sus alumnos están los ahora reconocidos Naomi Romo y Adrián Vázquez.
Crosthwaite mencionó que fue Hebert Axel quien convirtió un pequeño cuarto de la parte trasera de la Casa de la Cultura en un escenario para la representación teatral conocido como El Foro del Sótano.
“Era un espacio muy chiquito donde los actores hechos bola se cambiaban de ropa hasta que empezaba la función”, recordó.
El trabajo de Hebert Axel es considerado una gran influencia en las compañías de teatro de Tijuana al promover las artes escénicas durante todo el año y aprovechando cada una de las festividades, además de llevar el teatro a las comunidades que carecen de un escenario.
Actor Carlos Corro
Corro dijo que su compañero de vida por más de 20 años fue quien creó las temporadas teatrales que no había en Tijuana con el objetivo de que al menos los fines de semana la gente pudiera asistir al teatro.
Hebert Axel, dijo Corro, se preocupaba por generar público y solía decir que si las personas no iban al teatro habría que llevar el teatro a las comunidades al grado de hacer presentaciones en kioscos y hasta en las banquetas.
Por esa larga trayectoria como promotor e impulsor de las artes escénicas, los primeros días de noviembre se entregó una carta con más de mil firmas al Instituto Municipal de Arte y Cultura (IMAC) para solicitar que el escenario de la Casa de la Cultura en la colonia Altamira sea nombrado Teatro Hebert Axel.
“Creo que es un merecido reconocimiento a su labor, a su parte artística, a su trabajo como dramaturgo, fue un gran promotor de las artes y en general creo que merece ser reconocido por toda esta labor que tuvo durante muchísimos años”, agregó Corro.
Un trámite de muchos actos
La directora del IMAC, Minerva Tapia Robles, dijo que asignarle un nombre a una instalación pública es un proceso largo, además de que las instalaciones no le pertenecen a la ciudad, sino al estado y ese teatro está adscrito al Instituto de Cultura de Baja California (ICBC).
“Lo conocía desde hacía décadas como actor y como director de teatro, es amigo de muchos conocidos míos, de mi hermana, es una persona muy conocida en la región por su trabajo en el teatro”, comentó Tapia. “Por eso se me hace una petición natural, porque en todos sus años de trabajo, que fueron bastantes, él estuvo muy activo como maestro, actor, promotor cultural, profesional de las artes escénicas y trabajó en instituciones culturales como el Cecut y el IMAC, me parece una reacción de reconocimiento a su trabajo y eso es entendible”.
Sin embargo, recalcó, la Casa de la Cultura es un espacio que el IMAC tiene en comodato por lo que la petición debe ser turnada al ICBC, además de que se trata de un inmueble enlistado como Patrimonio Cultural del Estado de Baja California.
Tapia dijo que recibió la petición para nombrar el lugar como Teatro Hebert Axel, la cual estaba acompañada de 1068 firmas, por lo que como directora del IMAC se comprometió a darle seguimiento ante la Junta de Gobierno para enviarla a las autoridades estatales.
“Es un proceso que toma tiempo”, advirtió la funcionaria. “No es algo que se pasa de un mes a otro”.
El otro escenario
La regidora Edna Mireya Pérez Corona no cree que sea necesario darle un nombre al teatro, sino que considera que se deben construir más espacios culturales en la zona este de la ciudad a los que pueden asignarles los nombres de destacadas personalidades del arte como lo fue Hebert Axel.
Como presidenta de la Comisión de Educación, Cultura, Bibliotecas, Ciencia y Tecnología en el Ayuntamiento de Tijuana, Pérez Corona reconoció la trayectoría del Hebert Axel; sin embargo estima que sería más relevante la propuesta de nuevas instalaciones.
“Hay quienes reconocen que la Casa de la Cultura ya tiene un legado”, dijo la regidora. “A mí me pareció muy interesante la observación de un ciudadano que decía: ¿Por qué no construimos más casas de la cultura o más teatros y a esos sí les ponemos el nombre de este maestro y de tantos promotores culturales y de pintores de la calle que han muerto en la ignominia?”.
La propuesta está hecha y hay que darle tiempo a que los funcionarios municipales y estatales le den curso a la petición.
Mientras tanto, en Change.org se siguen recolectando firmas para la petición, que hasta ahora llevan 2092.
(Publicada el 18/11/2020 /Yolanda Morales, periodista independiente)