Se ampara Padrés por caso de ex empleada doméstica
03122015.HERMOSILLO, SONORA.MX. — Gisela Peraza, la ex empleada doméstica acusada de robo por el ex gobernador de Sonora, Guillermo Padrés Elías, ingresó este lunes al Cereso I de esta capital, pero ahora en calidad de testigo durante la reconstrucción de hechos solicitada por la defensa que lleva su caso.
Peraza que permaneció cuatro años en prisión y obtuvo su libertad al demostrar su inocencia, entabló una denuncia penal en contra del ex mandatario; de Agustín Rodríguez Torres, actual diputado federal del PAN y secretario particular del entonces jefe de gobierno, además de otros veinte ex servidores públicos que presuntamente participaron en la conspiración.
Este jueves Gisela se presentó en compañía de su abogado en la celda donde permaneció encerrada, donde por órdenes del entonces director del sistema carcelario, Ricardo Ornelas, fue torturada y se le «sembró» droga con el fin de abrirle un proceso con el que impedirían que la ex empleada de la Casa de Gobierno obtuviera su libertad.
Durante la audiencia de reconstrucción de hechos, Gisela recordó los lugares y los momentos en su paso por el centro de reclusión. «Fue un momento muy difícil, pero ya estoy perdiendo el miedo», declaró Peraza, luego de concluir la audiencia judicial.
«Si sentí temor (al ingresar de nuevo al penal), no sé qué les diría (alex gobernador Padrés), lo que sí creo que es existe la justicia divina, yo les comprobé que era inocente», recordó la ex empleada de la familia Padrés Dagnino.
El abogado de la defensa, Juan Antonio Ortega, aseguró que el ex gobernador sonorense solicitó y obtuvo un amparo de la justicia, esto, con el propósito de no ser detenido y obtener una copia del expediente que integra en su contra la Procuraduría General de Justicia y que ahora está en manos de un juez.
«Pero él tiene que presentarse, es un ciudadano con derechos y obligaciones, a nosotros no nos han notificado del amparo (del ex gobernador) pero a la Procuraduría de Justicia, si», comentó el abogado.
Ortega confirmó que fue el propio fiscal estatal, Rodolfo Montes de Oca, quien le informó que Padrés había solicitado y obtenido un amparo. «Quiere sobre todo copia del expediente, pero nosotros queremos que se presente», insistió.
Gisela Peraza permaneció cuatro años en prisión al ser acusada de haber robado 400 mil pesos y joyas propiedad de la señora Ivette Dagnino de Padrés, esposa del entonces mandatario y con quien trabajó durante 15 años como empleada doméstica.
Ella siempre alegó que era inocente y que fue víctima de una conspiración, debido a que por la característica de su empleo, tenía acceso a información íntima de la pareja que habitó durante seis años la Casa de Gobierno, residencia oficial del gobernante en turno.
Durante la escenificación de los hechos este jueves, Gisela ingresó a las celdas de castigo donde, según su abogado, fue torturada y desnudada por dos internas, quienes no estuvieron presentes en la reconstrucción de hechos. «Fue un momento muy difícil», puntualizó Gisela Peraza.
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